El tiempo pasaba veloz, mis coqueteos con la escritura me
apasionaban, “Fanny” que así se llamaba mi compañera, era divertida y simpática,
a las dos nos gustaba tomar a sorbos el aire, aspirar la energía de la
naturaleza desde el amanecer.
Tomábamos de nuestra bendita naturaleza toda la belleza que nos
regalaba, y clavando en nuestras retinas toda su belleza seguíamos inflando
nuestro globo de ilusiones. Pasaba el tiempo, Juan y yo seguíamos conociéndonos,
aunque creo que yo apostaba más en ello que él
Tampoco puedo decir que no me mostrara interés (lo tenía) y su
mirada era enamorada, sus frases melosas… tiernas
Sé que sentía algo loco por mí, y al mismo tiempo…tambien comenzó a quebrarse algo cuando alguna que
otra vez no aparecía a la cita que tenía conmigo.
Yo me estaba enamorando en serio, y esto me hacía sentir como si
fuese la principal protagonista de un cuento, aunque ya sabemos todos que los
cuentos como los sueños no siempre terminan bien
El final lleegó mas tarde, bastante más tarde, cuando el globo de los sentimientos se había hecho grande, al mismo tiempo comenzó a desinflarse
De cualquier manera, nos tocaba disfrutar cada momento, paladear las emociones, aunque solo nos estuviese permitido y con miedo, tocar
nuestras manos para echarnos a temblar con el solo roce de la piel…